Jamás vamos a poder hacer coincidir lo que vivimos con lo que decimos que vivimos, por eso Freud toma el sueño contado como materia prima para trabajar el psiquismo del paciente, y no el sueño vivido. Este es el nivel de objetividad en psicoanálisis, el sueño contado.
Porque nunca vamos a poder hacer coincidir lo contado con lo soñado, lo contado con lo vivido, por eso no se va a ocupar de lo que le pasa a las personas sino de su relato.
Esto es un nuevo nivel de objetividad porque ya las cosas no son cuando son, sino que son cuando son contadas, cuando son interpretadas. Es decir que los hechos pasados no existen como tales, los hechos pasados se van a constituir desde el presente.
Desde que no existe el pasado psíquico, desde que el pasado psíquico se fija desde el presente, es que existe la cura.*
* Tomado de M. Menassa. Siete conferencias de psicoanálisis en La Habana, Cuba. Pág. 165. Editorial Grupo Cero.
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